El ingeniero Leonel Castellanos presidente de la Unión Nacional de Empresarios (UNE).
Ambos países han retirado su personal diplomático acogiéndose a la ruptura de relaciones y a la espera de nuevos acontecimientos.
JULIO GUZMÁN ACOSTA
En medio de la reciente suspensión de relaciones diplomáticas de Venezuela con varios países, incluyendo República Dominicana, líderes empresariales dominicanos han expresado sus opiniones sobre las posibles repercusiones en el comercio y la economía local.
El presidente de la Unión Nacional de Empresarios (UNE), Leonel Castellanos, ha señalado que la suspensión de relaciones no tendrá un impacto significativo en el comercio de República Dominicana, pero podría afectar las inversiones y el turismo, aspectos que deberán ser evaluados en los próximos días. Asimismo, ha mencionado la posibilidad de presiones migratorias a las que el país no podrá escapar, debido a la situación generada por la decisión de Nicolás Maduro.
Por otro lado, Euri Andújar, presidente de la Asociación Nacional de Empresas Industriales de Herrera (ANEIH), ha lamentado la situación en Venezuela, sugiriendo que debe aclararse cuanto antes y clarificarse la situación sobre las elecciones, expresando su preocupación por la gran
población trabajadora de venezolanos en República Dominicana. Aunque considera que la situación podría afectar, especialmente en términos de recursos humanos, no cree que el país sufra grandes perjuicios en el ámbito de los negocios.
Andújar ha manifestado su esperanza de que la presión internacional, con la participación de República Dominicana, continúe siendo un referente del proceso democrático en la región. Ha expresado su deseo de que Venezuela retorne a un rumbo democrático, recuperando su importancia como nación y restableciendo el intercambio comercial para beneficio mutuo.
En el contexto de este conflicto diplomático, República Dominicana se une a otros países de la región en un llamado a la revisión de los resultados electorales en Venezuela y a la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA) para abordar la cuestión de la democracia en el país sudamericano. La reacción del presidente Maduro, con la suspensión de relaciones diplomáticas, ha generado un escenario de incertidumbre y tensión en la región, con la esperanza de una pronta resolución para el bienestar de ambas naciones.